A diferencia de lo que se creía hasta ahora, este felino podría ser un animal ‘social’ y no solitario
dUna vez más, todo lo que creíamos saber acerca de uno de los felinos más estudiados por los biólogos da un giro inesperado de 180 ºC. Según un artículo de investigación publicado por la revista Nature, el tigre de dientes de sable no era un depredador solitario -tal y como ocurre con la gran mayoría de felinos-, sino que vivía en ‘sociedad’ junto a otros de su misma especie debido a una presunta enfermedad de nacimiento.
El mito que gira entorno a la nobleza y majestuosidad de aquellos animales tan carismáticos que acabaron extintos sigue presente entre los divulgadores y estudiosos de la evolución y la genética. No son pocos los que han fantaseado con ‘resurrecciones’ de ciertas especies que hasta ahora solo encontrábamos en la ficción. Es el caso, por ejemplo, del Mamut Lanudo. El ancestro más próximo del elefante asiático, que hace ya 4 000 años pasó a la historia. Sin embargo, antes de plantearse jugar a ser Dios y ‘revivir’ a una especie, científicos de esta prestigiosa revista han optado por el pragmatismo apoyado en datos y pruebas reales para estudiarlos en mayor profundidad y conocer más sobre su comportamiento en vida, lo cual puede dar pistas del porqué de la extinción de ciertas especies con características similares, además de cerrar algunas preguntas básicas antes de insertar un elemento que desconocemos en un mundo en constante cambio.
Tal y como se ha revelado, el tigre de dientes de sable -de nombre científico Smilodon fatalis-, podría haber sido un felino ‘social’ debido principalmente a un problema crónico de cadera. Gracias a la visualización por tomografía computarizada (TC), los investigadores han podido afirmar que el Dientes de sable no era un felino solitario, ya que padecía ‘Displasia’, una enfermedad muy común en gatos y perros domésticos.
“La pelvis muestra una destrucción masiva de la cavidad de la cadera derecha que se interpretó, durante casi un siglo, como desarrollada por un traumatismo y una infección. La imagen por TC revela, en cambio, que las distorsiones patológicas caracterizan una remodelación crónica que comenzó en el nacimiento y llevó a la degeneración de la articulación a lo largo de la vida del animal”.

Recreación de un tigre de dientes de sable cazando (foto: Pulgar Panda)
Este es un estudio que se ha publicado a raíz de los restos de un especímen que en principio reflejaba una patología que durante años se creyó que procedía de un traumatismo y su posterior infección. Pero, la tomografía computarizada que usa los rayos X para crear una imagen en tres dimensiones de tejidos y órganos, demostró otra cosa muy diferente. Este problema era más bien una enfermedad degenerativa de nacimiento conocida como ‘Displasia’, lo cual abre la puerta a nuevas hipótesis. De todas ellas, la que más fuerza coge por parte del equipo de investigación es que a partir de cierta edad estos animales no podían valerse por sí solos, de forma que para cazar y proteger su territorio necesitarían por fuerza mayor vivir en sociedad junto a otros felinos que sí pudiesen hacer ese trabajo.